Escribo una nueva entrada tras dos años de inactividad. Me alegra.
Hoy más que nunca, el título de este blog, que acertadamente escogí en su día, cobra sentido.
En tuenti he puesto un estado que resume bien mi sentimiento. "Cuando te haces mayor te das cuenta de que el mundo es una mierda". Sí, amigos, una verdadera mierda.
No hay valores... Llego de una discoteca. Iba con gente de mi antigua clase de 2º de bachiller (ahora ya estudiamos carrera pero a veces nos reunimos). Una de las chicas no ha dudado en enrollarse con un desconocido.
Esto me fastidia porque:
Constato cada día lo que hace poco me dijo alguien: todas las tías (y yo matizo que casi todas, no podemos incluir a todas las mujeres del mundo, hay un pequeño porcentaje que se salva); bien, "todas las tías son unas guarras". Me da asco vivir en un mundo donde se frivoliza tantísimo. Cuando tienes una novia, es muy probable que a esa novia se la hayan pasado por la piedra bastantes, o que le haya metido bocado a desconocidos, o que su moralidad, en definitiva, sea NULA.
No se puede vivir sin un orden. Dudo que sea bueno prostituir tu cuerpo de esa manera. Porque si estás acostumbrad@ a prostituir tu cuerpo, lo seguirás estando aunque supuestamente te comprometas con alguien. Porque cuando ese alguien no te satisfaga o te canses de él, te irás con otro y le romperás el corazón. Y así sucesivamente, sin encontrar nunca una verdadera ESTABILIDAD.
Me hace gracia, a mucha gente le da miedo quedarse sola. Pues estáis escogiendo la senda oscura, chicos. Si uno no se compromete seriamente, si no tiene unos valores y sabe controlar su líbido, nunca encontrarás estabilidad. A mí me gusta el sexo, claro que me gusta, no soy extraterrestre. Pero no me iría a la cama con cualquiera, sino con una chica a la que quisiera y hubiese un sentimiento. Las relaciones de una noche tienen un peligro, que gustan y te acostumbras. Y para tener una estabilidad en una relación los valores son imprescindibles, y sí, los valores conllevan renuncias. Renuncias necesarias, pues al final, con tu pareja que te ama encuentras una recompensa total. Y sabes que la tendrás ahí para siempre, y para lo que necesites, sin temor a pasear unos cuernos que no entren por la catedral de Santiago.
Dudo que vuelva a una discoteca en un tiempo. Me he marchado decepcionado. Decepcionado de la gente que me rodea, de la mierda de mundo en el que tengo que vivir. A saber si algún día encuentro a alguien que sea como yo, y en definitiva, que merezca la pena. El porcentaje de personas decentes es francamente pequeñito.
Conozco a dos parejas de mi edad (dos parejas muy jóvenes, yo rozo los veinte años); que llevan juntas desde hace cinco años aproximadamente. Siempre han sido fieles, ves que se quieren, ves que su relación es una roca. Eso es felicidad. Y no la soledad y el vacío de prostituirte y después quedarte solo. Envidio muchísimo a esas parejas...
Si hay justicia en el mundo, encontraré a esa persona con quien hacer realidad este sueño.
jueves, 30 de junio de 2011
Suscribirse a:
Entradas (Atom)